No se pueden predecir, pero los expertos apuntan a un seísmo máximo de 7 grados en la provincia.
Granada se encuentra en una de las zonas con más peligrosidad sísmica de España, pero a nivel mundial el riesgo es solo moderado. Según Jesús Ibáñez, director del Instituto Andaluz de Geofísica, el peor terremoto que podría darse en Granada alcanzaría los 7 grados de magnitud -10.000 veces menos violento que el que sufrió Japón el 7 de marzo.
En cuanto a la intensidad -parámetro que mide las consecuencias que deja el seísmo- si se puede prevenir. «Hay que trabajar a nivel educativo, político y de construcciones», asegura Ibáñez, que también afirma que «habría que identificar los grandes recintos donde se podrían congregar los ciudadanos en caso de terremoto».
La ley obliga a disponer de un plan de emergencia para terremotos, cosa que ningún municipio de Granada tiene y en la capital está en redacción. La que si está siendo precavida es la Universidad de Granada, que está investigando con materiales que disipan la energía de los terremotos. Amadeo Benavent, director de la Escuela de Arquitectura y especialista en energía sísmica, pasó seis años en Tokio y afirma que el país nipón está más preparado. «Allí las vigas de hormigón armado son mucho más gruesas que aquí», relata. Más información en el artículo de la edición impresa de IDEAL firmado por M. Victoria Cobo.
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