martes, 3 de septiembre de 2013

Cabezas libres de piojos


Contra las creencias que lo relacionan con la falta de higiene, estos molestos parásitos pueden infectar a personas de todas las edades sin importar cuan limpio esté el cabello. Una experta da diez consejos para prevenir y combatirlos



Cabezas libres de piojos
Si hay picor se debe revisar concienzudamente el pelo.
El picor de cabeza, o prurito del cuero cabelludo, es el principal síntoma de que la cabeza se ha infestado de piojos. “Si notamos picores, lo primero es revisar el pelo con detalle”, recomienda la doctora Aurora Garre, asesora de Cinfa . “Nadie está a salvo de los piojos. Si bien se dan más casos en menores de entre 3 y 11 años, pueden infectar a personas de todas las edades, independientemente de que estas tengan el pelo corto o largo, rizado o liso… y por muy limpio y cuidado que lo lleven. Estos insectos prefieren el pelo limpio y sobreviven en el agua, así que, por mucho que nos lavemos el pelo, no los prevenimos ni conseguimos ahogarlos”.
La doctora Garre hace una lista de diez consejos para prevenir y combatir los piojos:
1. Utilizar repelentes de piojos para mantenerlos a distancia
Existen productos repelentes específicos que podemos usar para evitar la infestación por piojos. Sin embargo, no hay que confundir repelentes específicos con un pediculicida (exterminador de piojos). Los segundos no tienen efectos preventivos y, usado de este modo, podría terminar generando resistencias.
2. No compartir prendas que tengan contacto con el pelo
Los piojos no vuelan ni saltan, tan solo caminan. Al evitar el contacto directo entre cabezas y no se comparten peines, diademas, gorros, bufandas se previene el contagio.
3. Revisar el cabello de toda la familia
Si se detectan piojos en el colegio o la familia, o se percibe picor en el cuero cabelludo, es muy importante revisar con detalle el pelo de todos los miembros de la familia. En periodo escolar, se recomienda supervisar a los niños todas las semanas.
4. La lendrera, amiga inseparable
Es un peine de púas metálicas muy juntas, con el que se peina cada mechón. Al hacerlo uno por uno, se arrastran liendres o piojos. “Para hacerlo todavía más fácil, se recomienda humedecer el cabello, ya que en este entorno los piojos se mueven más lentamente, y colocar un paño blanco sobre los hombros del niño, para poder ver los piojos cuando caigan. En el caso de pelos rizados, también es útil un tratamiento acondicionador o una mascarilla que nos facilite la tarea”, dice la doctora Garro. Luego, aplicar un tratamiento pediculicida.
5. Que no quede ni una liendre
Además de los piojos, también hay que eliminar sus huevos o liendres, ya que de lo contrario, al cabo de unos días eclosionan. Podemos encontrarlos sobre todo en la zona del flequillo, tras las orejas y en la nuca, ya que en estas áreas más cálidas es donde más se desarrollan.
6. Consultar con el farmacéutico
En caso de encontrar piojos, debemos consultar al farmacéutico el tratamiento más adecuado para eliminarlos. Existen champús, lociones o espumas pediculicidas.
7. Aplicar el tratamiento sobre el cabello seco
Puesto que el agua podría diluir su eficacia, los tratamientos deben aplicarse en seco, masajeando la zona ligeramente, y de acuerdo a las instrucciones indicadas por el fabricante y el farmacéutico.
8. Nada de secadores de aire caliente
Tras aplicar tratamientos pediculicidas, no deben utilizarse secadores de pelo de aire caliente, ya que el calor inactiva el efecto insecticida residual.
9. Lavar las prendas a más de 60ºC
La ropa, sábanas y toallas de las personas infestadas deberán lavarse a temperatura superior a 60ºC y planchar bien las costuras, ya que los piojos no resisten el calor. Los peines y artículos de pelo pueden limpiarse con un pediculicida.
10. Aislar y aspirar
Los objetos que no puedan lavarse (por ejemplo, los peluches) deben introducirse en una bolsa cerrada durante tres días: puesto que los piojos se alimentan cada 4-6 horas de la sangre del huésped, no pueden vivir tanto tiempo aislados y morirán. Posteriormente, conviene aspirar estos objetos, así como los sofás, asientos y colchones.

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