'Enganchados' a las redes sociales

Granada hoy
Los casos de adicción a internet se han disparado en los últimos años entre los más jóvenes · En ocasiones los adolescentes utilizan las redes sociales para crear una imagen irreal de sí mismos con la que se encuentran más cómodos

Las redes sociales están de moda y ya son 15 millones de españoles los que tienen cuenta en Facebook y 11 millones, en Tuenti. Además, muchas empresas se ayudan de internet para crear marca, impulsar las relaciones públicas y generar clientes. Pero la red puede convertirse también en un enemigo. Está demostrado que no sólo los jóvenes abusan de internet, también lo hacen muchos adultos, además en sus horas de trabajo como forma de "escaqueo". De hecho, los jueces consideran ya el abuso de internet como motivo de despido. Y es que las redes sociales pueden ser muy útiles para contactar con amigos o familiares, para divertirse o establecer contactos profesionales, pero muchas veces se pueden convertir en un peligro si el usuario cae en la adicción.

Antonio Luis Maldonado Cervera es director del Grupo Alborán, un centro de psicología en el que en varias ocasiones han tenido que tratar con pacientes adictos a internet. "Lo primero que hacemos en estos casos es descubrir si se trata realmente de una adicción. Hay ocasiones en las que los padres traen a sus hijos creyendo que pasan demasiado tiempo en la red y padecen un problema psicológico pero descubrimos que el paciente no es un adicto". Maldonado explica que se puede hablar de adicción cuando la persona emplea las redes sociales de un modo repetitivo y esto tiene consecuencias negativas en ámbitos importantes de su vida". Otro tema es si hacen un buen uso de internet o no. Por ejemplo, "hemos tratado a algunos adolescentes que quedaban con personas que conocían únicamente a través de la red. Lo que yo aconsejo en estas situaciones es que se citen en un lugar público, que informen a sus familiares de esta cita, que lleven consigo un teléfono de contacto y que hayan visto previamente a la persona con la que van a quedar a través de fotografías o la webcam".

El psicólogo está a favor de que los padres ejerzan un control sobre sus hijos en estos temas. "El problema es que en la mayoría de las ocasiones los padres no están familiarizados con internet y las redes sociales, así que no pueden marcar unas pautas a sus hijos. Lo más adecuado sería que los padres sirvieran a sus hijos de modelo de lo que es un buen uso de internet. Sucede como en el caso del alcohol. Lo apropiado es que el adolescente vea en su padre el ejemplo de cómo consumirlo correctamente", explica el experto, quien resalta que la utilización de las redes sociales influye en los hábitos y costumbres de los jóvenes ya que los conduce al sedentarismo. "Además, es una actividad que invita a comer mientras se realiza, como sucede con la televisión. Esto afecta física y psicológicamente a los adolescentes".

Los pacientes que abusan del uso de internet suelen padecer también problemas con sus familias y estudios. "Los jóvenes con ansiedad social y falta de autoestima son más propensos a caer en estas adicciones porque les resulta más fácil comunicarse a través de las redes sociales. También hay personas que biológica y psicológicamente tienen más probabilidades de caer en problemas como estos, pero nunca se puede predecir".

La psicóloga Irene Luna Rodríguez, trabajadora del centro para adictos Cetpag, establece un perfil de las personas más propensas a caer en la adicción a internet: "La mayoría son adolescentes. Durante esa etapa la persona sufre cambios físicos y psicológicos con los que no se siente conforme y busca crear una figura de sí mismo con la que se siente a gusto a través de las redes sociales". En el caso de detectar una posible adicción en un hijo o familiar, el terapeuta de Álvaro Rodríguez, especializado en adicciones, recomienda contactar con un profesional. "Los padres no deben asustarse, solo aceptar que su hijo tiene un problema y que hay que ponerle solución. Lo principal es acudir a un centro especializado en el que se pueda tratar la posible adicción. Cuando los padres intentan solucionar el problema de forma directa lo más probable es que provoquen un conflicto familiar que empeore la situación, por lo que lo más adecuado es buscar a un profesional que haga de mediador", dice.

Irene Luna asegura que estas personas padecen incluso síndrome de abstinencia y que en su centro han visto cómo ha ido creciendo el número de adictos a la red. "Los últimos estudios sobre este tema indican que un 15% de los pacientes que acuden a centros para adictos sufren adicción a internet".