Una dieta sana y un poco de ejercicio puede ayudarnos a bajar los níveles de triglicéridos
Los triglicéridos son uno de los mayores enemigos para los adultos españoles. Hay quien dice incluso que la vida tiene un antes y un después de que aparezcan en una revisión médica. La dieta y las costumbres del día a día se ponen entonces al servicio del combate contra uno de los males que aquejan a un gran número de ciudadanos en España.
Los triglicéridos son un tipo de lípidos que aparece normalmente en la sangre y en los tejidos, especialmente en los adiposos, donde lucen como manifestación del exceso de calorías. La causa de su presencia, según explica el Journal of Clinical Endocrinology Metabolism, puede variar: el abuso del alcohol, el sobrepeso, diabetes, el uso de ciertos fármacos o enfermedades renales, entre muchas otras.
Su impacto en el cuerpo es especialmente intenso y ha sido asociado con un aumento del riesgo vascular. "En muchos casos está directamente relacionado con la arteriosclerosis", explica la doctora Irene Sánchez, especialista en endocrinología. En este sentido, asegura que "debemos prestar atención a los triglicéridos y mantener siempre los niveles por debajo de 150mg/dl".
Evidentemente la pregunta es, ¿cómo podemos rebajar los niveles de triglicéridos? "Si los niveles no son demasiado altos, no es necesario recurrir a fármacos obligatoriamente", aconseja la experta. Una buena dieta es clave para ello. Azúcares símples y alimentos con un alto índice glucémico -pan blanco, cereales refinados o patatas, entre otros- son las primeras prohibiciones. El alcohol también está en el punto de mira porque "aumenta la producción de triglicéridos incluso en pequeñas cantidades", según Sánchez.
Por contra, se recomiendan las verduras, legumbres y cereales integrales como principales fuentes de carbohidratos. "En ocasiones se aconseja también una dieta baja en grasas, aunque se impone la necesidad de mantener un nivel de grasas saludables adecuadas porque son más efectivas para lograr el objetivo", señala Sánchez. Pescado rico en Omega 3 o aceite de oliva son algunos de los imprescindibles para que el resultado sea óptimo. Y por supuesto un cambio del estilo de vida. "No se trata tanto del deporte como de evitar la sedentarización, que el cuerpo tenga movimiento es vital para conseguir que los triglicéridos desaparezcan del riego sanguíneo", concluye.
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