Consejos saludables Las temperaturas, al alza
Uno de los sectores de la población más vulnerables a la hora de sufrir un golpe de calor en verano son las personas mayores. Esta temporada los termómetros están superando los 35 grados y, de cara al fin de semana, se espera un aumento de las temperaturas.
Cada año es necesario recordar cómo pueden protegerse las personas mayores de las fuertes temperaturas y, en el caso de sufrir alguna complicación, conocer la forma de actuar.
El concejal de Bienestar Social, Fernando Egea, informó ayer sobre las medidas que hay que llevar a cabo para combatir los efectos del calor en los mayores. Para ello, el Ayuntamiento ha puesto en marcha una campaña a través del servicio municipal de teleasistencia que cuenta con 91 dispositivos de ayuda. Entre ellos hay cinco detectores de caídas que se colocan en la cintura y se activan al localizar un impacto, cinco unidades de vídeo que permiten a las personas beneficiarias visualizar al teleoperador con el que hablan -y que se instalan en casos de sentimiento de soledad o aislamiento- y cuatro botones para las personas con movilidad reducida en las manos.
La campaña promovida por el Consistorio insiste en que estos días de calor es mejor no salir a la calle durante las horas de mucho sol (de 12:00 a 17:00 horas) y aconsejan llevar sombrero, gafas y abanico. También es recomendable reposar y buscar la sombra.
El vestuario debe ser ligero, de colores claros, preferiblemente de algodón, evitando las telas ajustadas. El calzado, también debe ser cómodo y transpirable.
Las distintas lociones para protegerse del sol son muy variadas aunque, sin duda, el factor más alto siempre será el más efectivo, sobre todo si se renueva su uso cada cierto tiempo. En ocasiones, los lugares cerrados y sin ventilación aumentan el riesgo de sufrir un golpe de calor por lo que, desde el servicio municipal de teleasistencia, se recomienda evitar los transportes muy llenos y sin aire acondicionado.
En casa se aconseja cerrar las cortinas, persianas y cierres de las ventanas para no dejar entrar el sol y abrirlas cuando cae la noche. También es muy importante aprovechar las estancias más frescas de la casa. Si se utilizan ventiladores eléctricos es recomendable dejar entreabierta alguna ventana para renovar el aire, mientras que si se usa un aparato de aire acondicionado hay que dejar cerradas las puertas y las ventanas para mantener la temperatura de la habitación.
Durante las horas más calurosas no deben utilizarse aparatos que puedan producir calor como hornos, secadores y planchas y, sobre todo, se deben evitar los esfuerzos físicos. El truco que más alivia en estos casos es refrescarse de manera continua, ya sea con una ducha o un baño, pero la zona más vulnerable es la cabeza por lo que es conveniente remojarse de vez en cuando.
Hay que beber diariamente entre 6 y 8 vasos de líquido, ya sea agua, zumos o infusiones, ya que aportan las sales minerales que el cuerpo pierde por el sudor, al igual que es muy aconsejable beber uno o dos vasos de agua al levantarse para ayudar a la movilidad intestinal. Beber agua debe ser una constante, aunque no se tenga sensación de sed ya que así se evita sufrir los síntomas de deshidratación como la sequedad de mucosas y piel.
Resulta muy efectivo consumir alimentos con alto contenido en agua, como las frutas, las verduras y las ensaladas, evitar las bebidas alcohólicas y limitar aquellas que tienen cafeína y azúcar. Y sobre todo, hay que tener muy en cuenta llevar una dieta variada, moderada y equilibrada y un estilo de vida activo y saludable.
Cada año es necesario recordar cómo pueden protegerse las personas mayores de las fuertes temperaturas y, en el caso de sufrir alguna complicación, conocer la forma de actuar.
El concejal de Bienestar Social, Fernando Egea, informó ayer sobre las medidas que hay que llevar a cabo para combatir los efectos del calor en los mayores. Para ello, el Ayuntamiento ha puesto en marcha una campaña a través del servicio municipal de teleasistencia que cuenta con 91 dispositivos de ayuda. Entre ellos hay cinco detectores de caídas que se colocan en la cintura y se activan al localizar un impacto, cinco unidades de vídeo que permiten a las personas beneficiarias visualizar al teleoperador con el que hablan -y que se instalan en casos de sentimiento de soledad o aislamiento- y cuatro botones para las personas con movilidad reducida en las manos.
La campaña promovida por el Consistorio insiste en que estos días de calor es mejor no salir a la calle durante las horas de mucho sol (de 12:00 a 17:00 horas) y aconsejan llevar sombrero, gafas y abanico. También es recomendable reposar y buscar la sombra.
El vestuario debe ser ligero, de colores claros, preferiblemente de algodón, evitando las telas ajustadas. El calzado, también debe ser cómodo y transpirable.
Las distintas lociones para protegerse del sol son muy variadas aunque, sin duda, el factor más alto siempre será el más efectivo, sobre todo si se renueva su uso cada cierto tiempo. En ocasiones, los lugares cerrados y sin ventilación aumentan el riesgo de sufrir un golpe de calor por lo que, desde el servicio municipal de teleasistencia, se recomienda evitar los transportes muy llenos y sin aire acondicionado.
En casa se aconseja cerrar las cortinas, persianas y cierres de las ventanas para no dejar entrar el sol y abrirlas cuando cae la noche. También es muy importante aprovechar las estancias más frescas de la casa. Si se utilizan ventiladores eléctricos es recomendable dejar entreabierta alguna ventana para renovar el aire, mientras que si se usa un aparato de aire acondicionado hay que dejar cerradas las puertas y las ventanas para mantener la temperatura de la habitación.
Durante las horas más calurosas no deben utilizarse aparatos que puedan producir calor como hornos, secadores y planchas y, sobre todo, se deben evitar los esfuerzos físicos. El truco que más alivia en estos casos es refrescarse de manera continua, ya sea con una ducha o un baño, pero la zona más vulnerable es la cabeza por lo que es conveniente remojarse de vez en cuando.
Hay que beber diariamente entre 6 y 8 vasos de líquido, ya sea agua, zumos o infusiones, ya que aportan las sales minerales que el cuerpo pierde por el sudor, al igual que es muy aconsejable beber uno o dos vasos de agua al levantarse para ayudar a la movilidad intestinal. Beber agua debe ser una constante, aunque no se tenga sensación de sed ya que así se evita sufrir los síntomas de deshidratación como la sequedad de mucosas y piel.
Resulta muy efectivo consumir alimentos con alto contenido en agua, como las frutas, las verduras y las ensaladas, evitar las bebidas alcohólicas y limitar aquellas que tienen cafeína y azúcar. Y sobre todo, hay que tener muy en cuenta llevar una dieta variada, moderada y equilibrada y un estilo de vida activo y saludable.
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