La mayoría de los propietarios de viviendas de la provincia de Granada tendrán que rascarse el bolsillo aún más para pagar su recibo del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI). De los 168 municipios granadinos, 113 tendrán que encarecer la tasa para adaptarse a lo establecido por el decreto para hacer frente al déficit público aprobado por el Gobierno el pasado 30 de diciembre, que establece subidas excepcionales del IBI para los años 2012 y 2013.
El porcentaje de incremento dependerá de la fecha de la última valoración catastral en la que los municipios se basen para cobrar el impuesto, aunque el decreto establece una excepción: los consistorios que revisasen el catastro entre 2005 y 2007, los años del boom inmobiliario, no estarán obligados a incrementar el IBI durante los dos próximos años. Pero, en una provincia de 168 municipios, son relativamente pocos. Únicamente 55 municipios granadinos se librarán de la subida de la tasa impuesta desde el Gobierno central, según la información de la Dirección General del Catastro. Entre ellos se encuentran Guadix, Íllora, Motril o Lanjarón.
Frente a ellos se encuentran los otros 113 municipios en los que los propietarios, en menor o mayor medida, tendrán que afrontar durante los dos próximos ejercicios un esfuerzo económico extraordinario para pagar el IBI.
Las que más sufrirán son las poblaciones que realizaran su última revisión catastral antes de 2002. En estos casos no hay ni paliativos ni excepciones: los ayuntamientos tendrán que aplicar un incremento del 10% a los recibos que cobran anualmente a todos los propietarios de viviendas. Este es el caso de 55 municipios granadinos, incluida la capital, Atarfe, Almuñécar, Loja, Salobreña o Las Gabias, por ejemplo. Según el decreto del Gobierno, estos municipios también tendrán que aplicar un tipo impositivo mínimo del 0,5 en 2012 y del 0,6 en 2013.
El decreto establece, además, otros dos supuestos. Los 10 municipios que tuvieron una revisión catastral entre 2002 y 2004 tendrán que aplicar un incremento del 6% en sus recibos del IBI. Pero en este caso sí que hay excepciones, ya que, según el decreto, esta medida no se aplicará "a los inmuebles que pertenezcan a la mitad con menor valor catastral". Es decir, que el 50% de las viviendas de estos 10 municipios -las más baratas- se librarán del incremento del impuesto.
También hay salvedades para las viviendas cuya última revisión catastral se haya realizado entre 2008 y 2011. En este caso, la subida del IBI, fijada en un 4% y que afectaría en Granada a 48 municipios, no se aplicará a la mitad de las viviendas de menor coste.
El porcentaje de incremento dependerá de la fecha de la última valoración catastral en la que los municipios se basen para cobrar el impuesto, aunque el decreto establece una excepción: los consistorios que revisasen el catastro entre 2005 y 2007, los años del boom inmobiliario, no estarán obligados a incrementar el IBI durante los dos próximos años. Pero, en una provincia de 168 municipios, son relativamente pocos. Únicamente 55 municipios granadinos se librarán de la subida de la tasa impuesta desde el Gobierno central, según la información de la Dirección General del Catastro. Entre ellos se encuentran Guadix, Íllora, Motril o Lanjarón.
Frente a ellos se encuentran los otros 113 municipios en los que los propietarios, en menor o mayor medida, tendrán que afrontar durante los dos próximos ejercicios un esfuerzo económico extraordinario para pagar el IBI.
Las que más sufrirán son las poblaciones que realizaran su última revisión catastral antes de 2002. En estos casos no hay ni paliativos ni excepciones: los ayuntamientos tendrán que aplicar un incremento del 10% a los recibos que cobran anualmente a todos los propietarios de viviendas. Este es el caso de 55 municipios granadinos, incluida la capital, Atarfe, Almuñécar, Loja, Salobreña o Las Gabias, por ejemplo. Según el decreto del Gobierno, estos municipios también tendrán que aplicar un tipo impositivo mínimo del 0,5 en 2012 y del 0,6 en 2013.
El decreto establece, además, otros dos supuestos. Los 10 municipios que tuvieron una revisión catastral entre 2002 y 2004 tendrán que aplicar un incremento del 6% en sus recibos del IBI. Pero en este caso sí que hay excepciones, ya que, según el decreto, esta medida no se aplicará "a los inmuebles que pertenezcan a la mitad con menor valor catastral". Es decir, que el 50% de las viviendas de estos 10 municipios -las más baratas- se librarán del incremento del impuesto.
También hay salvedades para las viviendas cuya última revisión catastral se haya realizado entre 2008 y 2011. En este caso, la subida del IBI, fijada en un 4% y que afectaría en Granada a 48 municipios, no se aplicará a la mitad de las viviendas de menor coste.
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